A partir 2003 empieza un nuevo ciclo de poesías. El 27 de enero de dicho año encuentro mi primer trabajo de enólogo en Vinícola de Villarrobledo. Cambiar Madrid por Villarrobledo fue muy duro. Un pueblo totalmente desconocido para mi y un enólogo novel con un trabajo con una responsabilidad exagerada no hacían presagiar mucho futuro allí. Pero Dios todo lo puede...Todavía sigo viviendo en Villarrobledo.
Al no conocer a nadie y ser un pueblo tan cerrado para el que viene de fuera tuve que aceptar mi papel de inmigrante sin papeles. Escribir poesía me ayudó a vencer esos años donde apenas tenía vida social.
La primera poesía que voy a publicar se la escribí a una chica que trabajaba en el Caja Madrid de la plaza de Villarrobledo. Iba subiendo la calle la Estación, gire por el Callejón de San Blas y zas empezaron a fluir los versos. Esta poesía fue escrita el 22 de febrero del 2003 en mi primer piso de alquiler en la calle Villar.
EL CALLEJÓN DE SAN BLAS
Autor: José Carlos Díaz-Meco López
Vamos jilguero, ay vamos
jilguero
Eche sus alas como cometa
al vuelo
Vaya a comprar a la Luna este rezo
Una pulserita de luces y
plata
Para regalársela de
noche a mi niña
Que es la estrella que
más brilla de toíta España.
Ay, que si pudiera
guardarte en una cajita
Te guardaría de por vida en el
Callejón de San Blas
Donde mis besos se
ahorcan en tantas noches frías
Donde mis besos
vagabundean arropados de escarcha
Donde mis besos
tropiezan en una oscuridad de agonía
Donde mis besos tiritan
muletillas tildadas de heladas
Donde
mis besos resbalan sobre rocíos ciegos de Andalucía
De suelos sembrados con
antifaces sombríos de veladas
Donde mis besos encienden
sorderas campanadas sin uvas ni sidra
Ay, Callejón de San
Blas, jardín de besos de primaveras nevadas.
Yo me quiero
plantar
En el Callejón de San
Blas
Y sangrar de alegría
Acariciando las espinas
de tu rosal......
Construirte una chocita
Tras cosernos en las
Bodas de Caná
Para que perfumes los
cuartos de mi vida
Con pétalos rojos de tu
sonrisa......
Colgar sobre la pared de
tu alma
Un viejo y cansado reloj
roto
Pa que siempre de la
misma hora
Y perderme en la
eternidad de tu bello rostro......
Yo me quiero enraizar
En el Callejón de San
Blas
Y que tus raíces con las
mías
Se enreden en una sola
vida
Y que nos rieguen el
agua de los ríos
Que vengan a nuestras
ramas los pajarillos
Que venga el polen con
su pío pío
Y llene nuestra copa de
higos.....
Yo me quiero plantar
En el Callejón de San
Blas......
Armario donde soñé con
aquel abrigo
El abrigo que hay en ti
Para este corazón frío
Que heladito está por ti.
Yo me quiero plantar
En el Callejón de San
Blas
Y así coger esa rosa
Que tienes en tu jardín
Aquella que escribí
En un capullo infeliz
Para así florecer junto
a ti.
Yo me quiero plantar
En el Callejón de San
Blas……
Pero niña dame esa rosa
Que hay en ti
Y ese abrigo que escribí
Pa sobrevivir a un rocío
sin ti
Pero niña dame esa
amapola
Que vive sola en ti
Y ese trigal que planté
Para refugiarte de las
heladas de abril
Pero niña dame tus
ojitos de barro
Para que con mis manos
Haga de mi corazón
Un jarrón lleno del agua
de tus labios
Para que no se marchite
este amor
Barro y agua, acuarelas
y geranios
Yo me quiero plantar
En el Callejón de San
Blas
Y tender este pañuelo
Que bordé con tu pelo
Añoranza de los hilos de
mi piel
Para así recoger tus
lágrimas de miel.
Yo me quiero plantar
En el Callejón de San
Blas
Abrir la ventana de mis
entrañas
Sentimientos con hábitos
de clausura
Que escondí en el
convento de Santa Clara
Montañas de sarmientos
al relente de la Luna
Que arden sin decir lo
mucho que me gustas
¡Qué me gustas niña, qué
me gustas!
¿Cómo decirte que me
gustas?
Sentimientos con hábitos
de clausura
Que recogieron los Reyes
Magos entre bolsas de basura
Y me devolvieron el 6 de
Enero entre envolturas
-Que esta poesía no
merece ser pasto del olvido- me dijo
Si el amor es el lacre
que certifica este papiro
Que aunque a veces reme
sin ton ni son ni sentido
Esta góndola de versos
sin mechas ni reflejos ni teñidos
Que mis versos están de
ti impregnados y embebidos.
Ay niña que yo me quiero
plantar
En el Callejón de San
Blas
Y que el quiriquiquí de
tu mirada
Sea gallo que despierte
mis madrugadas
Que si con una docena de
claras de Luna
La noche hizo una
tortilla estrellada
Sobre los ojillos de tus
miradas
Mañana iré a rezar
A
la Calle de la Virgen
Y si me cruzo por la
acera
Con la taquilla del Gran
Teatro
Le daré las gracias a la
calle San Bernardo
Por guiarme al cine de
tus labios
En el teatro de mis
manos
Detrás del telón de tu
rastro
Escribiendo con la tinta
de la ternura
Dos entradas para ver
juntos
Como se cortejan dos
palomas al relente de la Luna.. ....
Y salpica que salpica
Y salpica que te cojo
Un manojo de esta brisa
Para que te hagas
con maña un moño
Ay, faro estrellado que
me guía
Pelo negro, suspiros de
mis antojos......
Y si un guiño me desvía
a la calle Santa María
Y miro como tus
ojos riegan la macetas del asombro
Cuando busco la sombra
de tus sonrisas
Debajo del cielo
estrellado de tus labios
Donde cantan alegres
perfumes los geranios
Donde el Sol revolotea
alegre como un canario
Donde los rayos de luz
renuevan sus alas con su pio pio......
Y en la Ermita de la Caridad a Dios le pio
Que venda mi alma por
ser rosa marchita entre las hojas de tus libros
Que si que si, que si
que no, el jardinero y sus delirios
Deshojando margaritas en
un Otoño sin vestio
Combate a muerte entre
el azar y el destino
Veinte pasos pa atrás
duelo al filo de una copa de vino
Por ser embebido por el
río de rosas y bodas de tus suspiros
¿Por qué mi pluma se
emborracha si bebe del tintero de tus ojillos?
¿Por qué la Luna se queda dormida en la
cuna de tu ombligo?
¿Por qué tus andares
sortean brisas que mueven aspas de molinos?
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